La Interfaz de Iluminación Direccionable Digital (DALI) es un protocolo estandarizado diseñado para el control de la iluminación digital, que permite redes de iluminación robustas, escalables y flexibles. Una de sus características principales es el uso de direcciones cortas, que permiten el control individual de los dispositivos dentro de la red.

¿Qué es una dirección corta DALI?
En un sistema DALI, a cada dispositivo de control (como controladores LED o balastos electrónicos) se le asigna una dirección corta única. Esta dirección permite la identificación y el control precisos de cada dispositivo dentro de la red. El esquema de direccionamiento permite hasta 64 direcciones cortas únicas, lo que facilita el control granular de cada dispositivo.

Estructura de direccionamiento y codificación
DALI utiliza un formato de direccionamiento de 8 bits. Para enviar un comando a un dispositivo específico, la dirección corta se convierte en un byte de dirección. Esto se logra multiplicando la dirección corta por 2 y sumando 1, desplazando la dirección y configurando el bit menos significativo para indicar un comando. Por ejemplo, una dirección corta de 5 se convertiría de la siguiente manera:
#define DALI_DIRECCIÓN_CORTA_A_BYTE_DIRECCIÓN(dirección_corta) (1 + (dirección_corta << 1))
Este método garantiza que el dispositivo reconozca los datos entrantes como un comando destinado a él.

Métodos de asignación de direcciones
La asignación de direcciones cortas se puede lograr mediante:
- Direccionamiento automático: al utilizar la función de direccionamiento automático del controlador DALI, el sistema asigna direcciones únicas a todos los dispositivos conectados.
- Direccionamiento manual: mediante software o herramientas especializadas, los técnicos pueden asignar o modificar manualmente direcciones para dispositivos individuales.
Es fundamental garantizar que cada dispositivo tenga una dirección única para evitar conflictos y garantizar una comunicación confiable dentro de la red.

Agrupación y control de escenas
Más allá del direccionamiento individual, DALI permite agrupar dispositivos y definir escenas:
- Grupos: Los dispositivos se pueden asignar a hasta 16 grupos, lo que permite el control simultáneo de varios dispositivos.
- Escenas: Se pueden definir hasta 16 escenas, cada una con una configuración de iluminación específica. Los dispositivos pueden almacenar niveles preestablecidos para cada escena, lo que permite transiciones rápidas entre diferentes ambientes o configuraciones de iluminación.
Esta flexibilidad permite un control dinámico de la iluminación adaptado a diversos entornos y preferencias del usuario.

Consideraciones prácticas
- Capacidad del sistema: Una sola red DALI admite hasta 64 dispositivos. Para instalaciones más grandes, podrían ser necesarias varias redes DALI o pasarelas.
- Comunicación bidireccional: la naturaleza digital de DALI permite que los dispositivos reporten información de estado, como fallas o parámetros operativos, mejorando las capacidades de mantenimiento y monitoreo.
- Cableado simplificado: Los sistemas DALI utilizan un bus de dos cables para alimentación y datos, lo que reduce la complejidad de la instalación. El cableado es insensible a la polaridad, lo que minimiza los posibles errores.
Conclusión
Las direcciones cortas DALI son fundamentales para que el protocolo proporcione un control de iluminación preciso y flexible. Al comprender y gestionar eficazmente estas direcciones, los diseñadores y técnicos de sistemas pueden crear entornos de iluminación sofisticados, eficientes y adaptables a las necesidades cambiantes.